domingo, 19 de mayo de 2019

07-04-2019 Marxa Cinc Cims 52 kms +2282 m

Ha sido mi primera participación en esta marcha de la que había escuchado hablar en numerosas ocasiones y desde hace bastantes años. Mi objetivo era el de seguir sumando quilómetros para afrontar con un mínimo de garantías el Trail Bastions, el primer día de Junio. Para ello también estoy inscrito en la Marxa Románica de Resistencia de Navás de 83.5 kms.

El día empezó mal. Me equivoqué al programar la hora del despertador del móvil y cuando me desperté era tarde. Serían ya pasadas las seis de la mañana y la salida era a las 6:30. Suerte que al ser una marcha el horario era entre las 6:30 y las 8 de la mañana. Mi primer pensamiento fue el de darme media vuelta y quedarme en la cama. Fue Mayte la que, sabedora de que si no iba estaria todo el día de mal humor, me insistió para que me levantara. Al fin y al cabo desde Terrassa, Castellar está a tiro de piedra. Así que me lo tomé con calma, Desayuné, cogí la mochila y me dirigí para allá. Me costó bastante aparcar y tuve que dejar el coche bastante alejado del local del Centre Excursionista de Castellar, punto donde se iniciaba la marcha.



Así que acabé saliendo a las 7:20 de la mañana. El problema es que llevaba a casi todo el mundo delante mío y en zonas estrechas podía encontrar aglomeraciones. Pero bueno, de entrada, la subida hasta la Mola no presentaba ese tipo de problema. Desde Castellar hay una buena subida hasta la emblemática cima a 1104 m de altitud. A partir de aquí empiezo a correr y recorro toda la Carena del Pagés hasta el Coll d´Eres. En este tramo ya empiezo a adelantar a grupos más numerosos de participantes. Ahora viene un tramo más complicado y es la bajada hasta el Collet del llor y la Canal homónima. Aquí si que me encuentro tapones y me cuesta avanzar. En un adelantamiento, una mujer se enfada conmigo porque la he rozado. Quizás tenía razón, y decido tomármelo con más calma, una vez abajo ya podré coger mi ritmo. Algunas personas se dejan adelantar, pero hay otras que parece que les sienta mal y da la sensación de que hacen todo lo posible por ocupar todo el sendero y no dejar opción a que los osados corredores aprovechen pequeños ensanchantamientos.



Bueno, por fin llego abajo, al Marquet de les Roques, donde hay un completo avitualliento. Desde aquí se puede trotar hasta Sant Llorenç Savall donde se coge, en subida, la misma pista por la que se llega a este pueblo en la Matagalls-Montserrat. Vamos por pistas todo el rato, con ciudado de no saltarse ningún cruce ya que en estos no hay muchas indicaciones y debes intuir cual tomar. Si ves una señal al poco rato es que vas bien, si no, has de dar media vuelta.



Seguimos cambiando constantemente de caminos y esto me desorienta un poco. Finalmente llegamos a un punto en que tomamos un sendero en subida bastante explosiva y llegamos a un lugar estupendo: Sant Sadurní de Gallifa, con unas vistas espectaculares. Ahora toca una bajada larga y técnica hasta el pueblo de Gallifa. donde hay otro buen avituallamiento. Salimos de aquí por pistas y al rato tengo un pequeño depiste que me hace perder yo creo que casi veinte minutos. La causas son las que ya he explicado anteriormente. Una vez retomado el camino correcto iniciamos la subida a la zona del Farell culminando en el Pic del Vent. Desde aquí también hay muy buenas vistas.



El día se está poniendo feo, pero de momento va aguantando. Desde el pico iniciamos otra bajada técnica y después de un tramo de pistas que más o menos se dejan correr subimos al último alto de la jornada: el Puig de la Creu. Ahora ya solo queda bajar hasta Castellar. Ha empezado a llover y debo ponerme ropa para protegerme.



Llego a Castellar en 9 h y 5m. Me ha gustado bastante esta marcha.







10-03-2019 Marató de BCN

Ha sido mi vigésimo tercera participación en una maratón y la décima en BCN. Mi motivación para correr esta distancia no es la misma que hace un tiempo y mi nivel se encuentra en un claro declive. De todas formas he entrenado bastante bien haciendo tres medias maratones y una carrera de montaña de 48,5 kms. En estos meses de entrenamiento he ido mejorando mi estado de forma pero en las dos últimas semanas he sufrido bastantes molestias en el gemelo derecho, situación que ya empieaza a ser habitual en los últimos años cuando entreno para una maratón, debido a las series y las tiradas largas.

Creo que por nivel estaba preparado para acercarme al sub 3:20 aunque las limitaciones por las molestias en el gemelo me lo han impedido. 

Después de las malas sensaciones de la Maratón de Budapest le tenía ganas a la distancia. Pero está claro que esa excitación que sentía hace unos años la semana anterior a la carrera ya no la siento. Quizás, la energía que le dedico al trabajo, hace que mis pensamientos y sobre todo, mis ilusiones ya no estén tan centradas en la maratón. 

Así que el sábado 9 de marzo tomé el tren en dirección BCN para ir a recoger el dorsal. Antes, este acto, ya por sí, generaba en mí un gran cosquilleo por mi estómago. Ahora, se ha convertido en un trámite más, el cual incluso me fastidia. Durante el viaje estuve observando a las personas que subían y bajaban del tren. Yo definiría el ambiente como de mucha seriedad. No se apreciaba ningún signo de alegría en la gente. Todo el mundo estaba ensimismado en su mundo particular. Unos miraban el móvil y otros, los que iban acompañados, hablaban de situaciones difíciles en el trabajo. Era sábado y nadie parecía estar tranquilo y relajado. Por mi cabeza circulaba la idea de que la situación política catalana y la era post crisis habían sumido a la sociedad en una depresión colectiva.

Al llegar a BCN y coger el metro hacia Plaça Espanya el ambiente cambió bastante. Los residentes o trabajadores de la ciudad seguían el mismo patrón anteriormente descrito pero los turista, que eran muchos, daban otro color.. Estos eran los únicos que parecían alegres y relajados. Lo demostraba su forma de vestir, sus conversaciones, sus risas y sus miradas. Algo es algo, pensé.

Llegué a la feria del corredor con la intención de hacer directamente la gestión y hacer el camino de vuelta a Terrassa. Recogí el dorsal y pasé por los estands, ya que el camino de salida y la recogida de la camiseta así lo requiere. Había personas que paseaban y se paraban a mirar prendas deportivas y todo tipo de complementos. Yo pasaba rápidamente intentando no cruzar mi mirada con ninguno de las empleados para que estos no se dirigieran a mi con el objetivo de intentar que rellenara algún formulario para participar en un sorteo de material deportivo y tener así mis datos para luego llenar mi correo electrónico de publicidad. Me sentía mal conmigo mismo. Tómatelo con más calma, me decía, pero ese pensamiento no producía ningín cambio en mi comportamiento. Había algunos estands que me parecían interesantes, en especial, los relativos a complementos de nutrición durante la práctica deportiva en largas distancias, pero en vez de pararme y curiosera un poco en ellos, aceleraba el paso y los pasaba de largo. Quizás, para compensar, me paré en un puesto de información de la Maratón de Bilbao, la cual hace tiempo que la tengo en mente, por volver unos días a esa estupenda ciudad y porque es una carrera nocturna. Sin más concesiones acabé por salir de la feria del corredor y afrontar el trayecto inverso al realizado anteriormente.



Esa tarde-noche, preparé todo lo necesario para la carrera. Por primera vez en mi vida me estaba planteando la posibilidad de tener que abandonar y no poder completarla. No tenía claro si mi gemelo aguantaría, para ser más exactos, la zona músculo tendinsa del sóleo de la pierna derecha. Al final, se me olvidó preparar, entre los materiales para la carrera, algo de dinero por si debía coger el metro. Supongo que es la falta de costumbre de hacer esto pero que nunca está de más.

Por la mañana vuelvo a tomar en tren en dirección BCN. Este estaba ocupado por personas que claramente iban a realizar la misma actividad que yo y otras que salían de fiesta y regresaban a casa, mostrando signos evidentes de cansancio y excesos. En el metro, mucho más corredores. Al llegar a la zona de salida me dirijo a las escaleras de las Fonts de Montjuich, lugar escogido por los miembros de corredors.cat para hacer una foto y saludarnos. Allí me ecuentro bien saludando a personas con las que he coincidido en muchas carreras y con las que hay una buena complicidad. Los corredores Jorfer y XaviNad celebran su vigésimo quinta participación en esta carrera. Tiene mucho mérito lo suyo. Han vivido muchas épocas de la prueba y sin duda esta es la mejor. Bueno, algo es algo, no todo es depresión y negatividad. El ambiente en general es bueno y la euforia, esa que yo ya no tengo pero que conozco bien, empieza a manifestarse en numerosos grupos de corredores que se van encontrando en la hora acordada. Después de la foto y los comentarios de rigor, cada uno se dirige al guardarropa y a realizar algo de calentamiento.

La ceremonia, ya en los cajones de salida, es siempre la misma. Un spiker gritando intentando que la gente salte, chille, baile y levante los brazos. Música a todo volumen. gente eufórica chocando la palma de las manos. Otros, como yo, prefieren aislarse del sonido cerrando los ojos e intentando conectar con su interior para darse ánimos y coger conciencia de todo el trabajo realizado para poder estar allí en esa momento. Dan el pistoletazo de salida después de escuchar el himno de la BCN olímpica y una lluvia de confetti cae sobre los participantes, en medio de aplausos y gritos. Mi salida es en el tercer cajón, creo que dos minutos después de la primera.

A partir de aquí, las mismas sensaciones de siempre. Un poco de atasco nos hace correr a tirones, bajando el ritmo demasiado o acelerando para superar a alguien demasiado lento. Todos buscamos nuestro lugar y el poder coger el ritmo regular que nos hemos marcado para la carrera. No tardamos demasiado en conseguirlo y en ese momento siento una de las sensaciones que más me gustan de las carreras de asfalto: el avanzar por calles y avenidas de la ciudad escuchando el sonido que produce el contacto de las zapatillas con el suelo. Ese sonido sordo, que amortigua al resto de los sonidos de la ciudad, y que te envuelve y propicia un estado de paz y calma muy atractivo para mi. Fue esta la sensación que más me gustó en la primera carrera en la que participé hace ya algunos años y me sigue fascinando.



No me encuentro muy bien, me siento un poco forzado y no voy cómodo aunque mis tiempos de paso no acaban de ajustarse a los 4:45 minutos por quilómetro previstos. Por si esto fuera poco, mi gemelo me empieza a molestar. No he conseguido solucionar estas molestias y soy consciente que 42 kms. son muchos para correr con ellas, y lo que es peor, que acabe por tener una lesión. Intento, mentalmente, relajar la zona afectada y parece que a momentos lo consigo, pero enseguida el dolor vuelve a instalarse en su sitio. Con esta guerra mental voy haciendo quilómetros. La Meridiana se me hace muy pesada ya que el tramo lo han alargado y no me había estudiado bien los pequeños cambios en el recorrido que la organización había decidido hacer, con el objetiva de hacer la carrer más rápida. Paso la media maratón en 1:41, un poco más de lo previsto pero aún dentro del límite de hacer una marca aceptable y bajar cómodamente de las 3 h 30 minutos. El dolor se acentúa y me tomo un Ibuprofeno para ver si me ayuda. Esto me alivia un poco pero no lo suficiente. tampoco voy cómodo, me siento algo forzado. Así que tomo la decisión de aflojar mi ritmo y controlar el dolor en el gemelo y pasar de mirar el reloj. Esto último es clarament imposible, pero mi objetivo pasa a ser acabar dignamente la carrera y no lesionarme de gravedad. Así que mis parciales van siendo cada vez más lentos pero parece que así voy controlando la situación. Van pasando los quilómetros y cada vez me invade la certeza de que acabaré la carrera. Paso el 30, el 35 y no me estrello contra el muro. en realidad estoy sufriendo poco, aunque me fastidia que me adelante tanta gente. Creo que en 38 paso por el avituallamiento de corredors.cat y aquí me reciben con algarabia y me llaman por mi nombre. La verdad es que esto siempre te da una energía extra durante unos centenares de metros. También hay que reconocer que el ambiente de la carrera a nivel de público es excelente. Encaro la parte final de la carrera, paso por Colón y enfilo el Paral.lel, que este año no se hará entero para suavizar el final de la carrera. Esta variante ya la habían hecho en alguna edición anterior. Paso el 40 y cuando cruzo el 41 me permito gritar a todo la gente de mi alrededor ¡venga, ya lo tenemos, solo nos queda un quilómetro! Ya hacía un rato que me había adelantado la liebre de 3:30. En el final me encuentro bien aunque justo antes de encarar la última recta en la Avda. María Cristina me adelanta como una exalación Manolo M. la liebre de todas las liebres, y el cual este año había aceptado el encargo de guiar al grupo de 3:30, posicionado en el cajón de salida justo detrás del mío. Aprieto lo que puedo y acabo entrando con un tiempo de 3:33:12. El haber dosificado creo que ha sido una buena decisión.


Después de pasar la línea de meta y recoger la bebida me encuentro con un grupo de corredors.cat que acostumbran a esperar un rato al final de las carreras para saludar. Es de agradecer que haya gente tan atenta. Algunos han cumplido su objetivo y han hecho marca personal. Oros se han quedado cerca y otros claramente lejos, pero todos tienen una sonrisa en la cara. Somos conscientes del trabajo que supone afrontar una carrera de esta distancia y eso hace que entre nosotros haya el máximo respeto.

La posición final ha sido la 3103, 112 de mi categoría.

Por cierto, la organización ha estado impecable y los avituallamientos han sido quizás los mejores que he visto nunca en una maratón.

Ahora toca volver en tren a Terrassa, comer y descansar. Mañana, en el trabajo, todos me preguntarán y cuando yo les diga mi marca me dirán "muy bien ¿no?". Y yo diré que si para no tener que dar demasiadas explicaciones aunque la verdad es que no, que no estoy del todo satisfecho, y que creo que aún tengo físico para estar sobre las 3 horas y 20 minutos.

Y lo voy a seguir intentando.

Km 5       24:05        24:05
Km 10     23:13        47:18
Km 15     23:58       1:11:15
Km 20     24:19       1:35:33
1/2                           1:40:49
Km 25     24:42       2:00:14
Km 30     25:46       2:25:59
Km 35     26:49       2:52:48
Km 40     28:26       3:21:41
Final        11:59       3:33:12


martes, 9 de abril de 2019

24-02-2019 Mitja de Granollers

Ha sido mi tercera participación en esta carrera, una de las clásicas de Catalunya y posiblemente la mejor organizada de todas. El precio me parece excesivo, eso sí.

Este año han vuelto al recorrido de hace algunos años. Es el mismo que hice en mi primera participación aquí, en el año 2005, donde me crucé con el gran Haille Gebrasselasie.

En esta edición mi objetivo era mejorar mis marcas de Terrassa y Sitges y en función del tiempo decidir cual sería mi ritmo de cara a la Marató de BCN, dos semanas después.



El recorrido es exigente y hay que gestionarlo bien. Los primeros 10 kms son claramente en tendencia a subir con algún descanso y un tramo más duro al llegar a La Garriga. Desde aquí se vuelve hacia Granollers en clara tendencia de bajada pero con cuatro repechones que te rompen el ritmo. Desde el km 17 aproximadamente ya si que es un larga bajada hasta la meta donde si llegas bien puedes apretar y darlo todo.

Me sentí bastante bien durante toda la carrera aunque al final no pude apretar tanto como esperaba. Mi tiempo final fue de 1:34:04, mi mejor marca en estos últimos dos años ya que mi nivel está en claro declive. Lejos me queda ya el 1:31:38 del año 2015.

Aún así estoy contento con mi rendimiento. Seguramente plantearme hacer la Marató de BCN en 3:20 sea demasiado justo por lo que bajar de 3:30 ya estaría bien. Mi posición ha sido la 821 de 4536 llegados.

sábado, 23 de febrero de 2019

17-02-2019 Vallés Drac Race

La verdad es que hoy tenía ganas de escribir sobre el día de ayer. Fué un día donde al margen de disfrutar de la carrera, en esas montañas tan cercanas y estimadas que conforman el Parc Natural de Sant Llorenç del Munt i Serra de l´Obac, mis emociones durante todo el día hasta que me fui a dormir fueron complicadas de gestionar.

Me levanté a las 6 de la mañana para iniciar mi rutina de antes de cada carrera: desayunar, acabar de preparar la mochila y tomar un café. A las 7 salía de casa en dirección a la salida, que tengo en este caso a diez minutos escasos en coche.

La primera sensación que tuve al despertar fue al recordar que mi hija la noche anterior nos había llamado para decirnos que su gato se había escapado de casa y no había vuelto. Es un gato joven y mi hija vive en un primero. Cuando nos lo dijo sentí una punzada en mi abdomen, la misma que volví a sentir al despertar. Era la primera vez que el gato se aventuraba a salir de casa y posiblemente se haya desorientado por lo que no ha sabido volver. Me dió mucha pena enterarme ya que mi hija había acogido dos gatitos (él y su hermana) que estaban en un centro de recogida y que gestionan estas situaciones. No han  tenido mucha suerte de momento en la vida. Han ido de un sitio para otro y cuando parecían tener un hogar estable ha ocurrido esto. Me imaginaba al gato bajo las ruedas de un coche o aterrorizado encondido en algún lugar perseguido por otros animales. También, es verdad, me lo imaginaba en manos de algún alma bondadosa que lo llevaría a algún veterinario donde le leerían el chip y lo devolverían a casa.

Por la mañana miro el móvil a ver si hay algún mensaje que diga que el gato ha aparecido. Nada. Llego a la salida de la carrera con mucha antelación. Recogo mi dorsal, me coloco el chip y me voy a tomar un café a un bar que estaba abriendo en ese momento, más que nada para hacer tiempo. Me tomo mi café y voy al coche a dejar mis cosas y prepararme ya para la carrrera. Una vez hecho esto me encuentro con mi amigo Agustín "Egaramossenaire" y me pregunta si quiero un café. Ya no quería más pero aún así le acompaño al bar y hablamos sobre la carrera. Cuando le conocí no estaba tan fuerte como ahora y salía con él y otros "Egaramossenaires". Ahora ya no me atrevo, tienen demasiado nivel para mí. El antes no hacía carrreras tan largas pero ahora se está animando con las largas distancias. Hablo un buen rato con él y otros amigos suyos y nos dirigimos a la salida. El conoce a todo el mundo y finalmente lo pierdo entre tanta gente. Queda poco para la salida. Dudo si dejarme el paraviento o quitármelo ya. No hace mucho frío y sabemos que durante el día hará bastante calor. Decido dejármelo y esperar a quitármelo en el primer avituallamiento que no está especialmente lejos. Saco los palos de la mochila aunque los llevaré plegados en la mano hasta que empiecen las primera subidas.

Dan la salida entre la euforia general. Los primeros quilometros son llanos hasta salir de la ciudad y vas todo el rato corriendo con más gente. El nivel actual de los corredores es alto y yo me voy rezagando y observo como me quedo bastante atrás. Ya estoy en mi sitio, es mi nivel. Mi objetivo es llegar al primer avituallamiento y a partir de aquí, por caminos más anchos, coger mi ritmo.


Desde el avituallamiento se baja por una pista toda la Carena de Can Sabater. En algunos puntos la vista de la cara norte del Massís de Sant Llorenç es espectacular. La carrera tiene un recorrido circular saliendo de Terrassa en dirección a Mura y volviendo de Mura a Terrassa por la Serra de l´Obac. La segunda parte es más bonita que la primera bajo mi punto de vista pero en los primeros 24 kms también hay lugares de interés, como éste que he comentado. Una vez llegado abajo se alternan tramos de riera, pistas y senderos hasta llegar a la Vall d Horta. Es este un enclave magnífico donde hay vistas de la pancha del Montcau, la Roca Mur y Castelldepera. Antes habíamos pasado por un avituallamiento en el Sot de Matalonga, si no estoy equivocado, donde los dos hombres que estaban atendiéndolo se estaban pelando de frío ya que está situado en un zona muy sombría.

Voy todo el rato trotando pero adelanto a muy poca gente. Deduzco que más o menos todos los participantes están en su sitio. Intento no parar de trotar hasta llegar al avituallamiento del Marquet de les Roques. Ahora hay que subir la Canal del Llor hasta el Collet del mismo nombre. Una subida dura pero no muy larga pero que dosificando el ritmo se sube bastante bien. Llegados al Collet del Llor vamos franqueando para acabar bajando hasta la carretera de Talamanca. No la cruzamos y a la derecha tiramos por un sendero que baja y enlaza con una pista. Ahora sí que atravesamos la carretera y pasamos por la Masía de Sant Lleïr, una casa magnífica con vistas privilegiadas.

Me vuelvo a acordar de Milo, ¿habrá aparecido? me pregunto, mientras bajamos con decisión hacia el pueblo de Mura, donde hay instalado un control de paso y un avituallamiento. Llego en 3 h 33 min.. Pensé cuando pasé por el km 15 (1:51) que llegaría antes pero no ha sido así. O bien el punto quilométrico 15 estaba mal indicado o he tardado demasiado en completar nueve quilómetros. En cualquier caso mi esperanza de acabar en siete horas se desvanece. Como rápido y salgo dispuesto a afrontar la segunda parte de la carrera. Llevo 3 h 40 min.

Desde Mura se baja hasta la riera de Nesprés y al poco enfilamos la subida hasta el Puig de la Balma. Antes de llegar aquí nos desvían a la izquierda y hacemos  un tramo de transición que va enlazando senderos y pistas hasta coger una dura subida hasta el Coll de Boix. Esta es la subida mas larga de toda la carrera pero es bastante llevadera. Llego al avituallamiento instalado un poco antes del coll. Llevo cinco horas y ya estoy en el quilometro 33 aproximadamente. Pienso aquí que el acabar rondando las siete horas vuelve a ser posible. He subido bien y el recorrido hasta Terrassa me lo conozco de memoria. He entrenado muchas veces por estos caminos.


Me animo a mí mismo y me voy diciendo "vamos aprieta, vas bien, tienes fuerza". La verdad es que me siento bastante entero y con ganas. Una vez pasado el Coll de Boix dejamos la carena y giramos a la derecha en direción al Coll de Tanca. Desde aquí pasamos por la Font de la Pola, Coll de Tres Creus (avituallamiento), Turó de la Carlina, Roca del Corb, Turó de Puig Codina y Turó dels Caus Cremats. Me encanta esta zona. Bajamos ahora hasta la pista que enlaza la urbanización de Les Pedritxes con Les Foradades. En el cruce de pistas hay otro avituallamiento. Seguimos la pista a la izquierda en fuerte subida y ascendemos al Turó de les Pedritxes, popularmente conocido como Pico del Aguila. Miro el reloj y soy consciente de que pasaré de largo de las siete horas, Yo me siento fuerte pero mis previsiones no han sido acertadas. O bien he calculado mal o los puntos quilómétricos nos están bien ubicados. Pasó por el turó en 6 h 30 min. En media hora no llegaré pero aún así decido apretar para acercarme al máximo a las malditas siete horas y, como mínimo, bajar de mi marca anterior de 7h 18 min.


Hacemos la preciosa Carena de les Pedritxes en tendencia a bajar con algún repechón hasta coronar el Turó de Sant Joan. Aquí nos dicen que nos faltan cuatro quilómetros. Me empiezo a poner nervioso y a dudar si bajaré de esos 7:18. Al iniciar la bajada varios corredores vienen de frente a mi. Comentan que hace rato que no ven señales y que vamos mal. Yo les digo que no, que alguien habrá quitado las señales pero que el camino es el correcto. Algunos me creen y otros no. Yo sigo para adelante convencido de ir bien. Vamos por un sendero que va franqueando el turó por su falda y a los cinco minutos vemos señales de nuevo. Ya solo toca bajar hasta el último avituallemiento. Casi no me paro y sigo corriendo por pistas y senderos.

El tiempo transcurre inexorablemente. Pasamos por los "Estudis Audiovisuals" también conocidos como "El Sanatorio" por su pasado como hospital del tórax. Sigo corriendo y apretando. Finalmente cruzo la línea de llegada en 7:16:46. No estoy del todo contento aunque la verdad es que me he esforzado bastante y lo considero un gran entrenamiento de cara a la Marató de BCN del día 10 de Marzo. Mi posición ha sido la 105 de 140 llegados.

En la llegado me recibe la gran Anna Cos y el Josep Mirabet, ambos corredores con una gran trayectoria y muy implicadios siempre en mil y un proyectos. Me hace ilusión que me reciban ellos.

Saludo a David, alma mater de esta carrera. Después de unos 10 minutos de espera me dan mi plato de fideuá, la cual devoro con pasión. Miro el móvil a ver si hay noticias del Milo. Nada, sigue perdido. El pobre gato no ha tenido una madre que les enseñe y les acompañe en sus primeros pasos en este complicado mundo. El se ha dejado llevar por el instinto y  la curiosidad pero sin nadie que le guíe.

Me siento triste. Cojo el coche y llego a casa. Me ducho y me echo una buena siesta. Me levanto y empiezo a sentirme nervioso. Hoy juegan la final de la Copa del Rey de baloncesto el Barça y el Real Madrid. Me ponen muy nervioso este tipo de partidos. Lo veo pero sin verlo, haciendo zaping y mirando de vez en cuando. Soy del Madrid y después de ese final de infarto aún me enfado más. Mayte se enfada conmigo porque no estoy por ella, solo estoy en mi mundo y en mis cosas.

En fin, el día acaba raro. Tenía que estar contento pero todo se ha ido enrareciendo y me voy a la cama con la sensación de no saber gestionar las cosas de la vida. No me gusta como soy, pienso, aunque sé que no es verdad, es un pensamiento demasiado radical. Lo que no me gusta es ser del Madrid, aunque este es un tema ya casi de pisicólogo.

Solo pienso que el enfado, el "neguit" que llevo, se me pasará. De eso estoy seguro. Y si aparece Milo todo lo demás no tiene ninguna importancia.

Ah, mi amigo Agustín ha finalizado con una meritoria marca de 6h 26 min. ¡¡Felicidades!!





sábado, 2 de febrero de 2019

Mitges maratons de Sitges i Terrassa

Después de un 2018 plagado de lesiones empiezo este nuevo año con ilusiones renovadas. De entrada estoy inscrito a la Marató de BCN del mes de Marzo. Para empezar a coger ritmo de competición he participdo en estas dos medias maratones en el mes de Enero.

13-01-2019 Mitja Marató de Sitges.


Tenía la referencia del 2016 donde hice una buena marca (1:32:33) pero está claro que no podía aspirar a nada parecido. Como máximo a acercarme lo máximo posible a 1 h 35 min. Son dos vueltas a un circuito de 10,5 kms y el perfil es bastante bueno. Aguanté bien hasta el km 15 pero al final me desinflé un poco. Aún así tuve buenas sensaciones en general. Mi tiempo final fue de 1:37:39 y la posición la 610 sobre 1676 llegados.



27-01-2019 Mitja de Terrassa.

Me hacía ilusión volver a correr esta prueba. Creo que ha sido mi décimoquinta participación en esta carrera tan especial para mí. Ha sido ésta una edición de cambios ya que han trasladado la zona de salida/llegada a la Rambla después de diecinueve años en Vallparadís y Avda. 22 de Juliol. También han habido algunos cambios en el recorrido buscando un perfil más suave en los últimos quilómetros. Yo he estado en la carpa de corredors.cat entregando los dorsales de los asociados que estaban inscritos a esta carrera. También vino Javi, en su debut en la distancia, y tres compañeros de La Coma: Pere, Unai y Achraf que corrieron la Santi Centelles de 5 kms.


La carrera me fue bastante bien, El objetivo era el mismo que en Sitges, es decir acercarme lo máximo posible a 1:35. Fui con la liebre de este tiempo hasta pasado el km 9 donde me descolgué al final de l´Avda. del Vallés y ya decidí gestionar yo mi ritmo. A partir del km 15 se puede apretar bastante hasta la meta. Mi sorpresa fue cuando al entrar vi que mi tiempo era inferior a 1:35. No tenía referencias ya que sin querer había parado el cronómetro en algún punto pasado el km 11. O sea que entré en 1:34:36. Luego, hablando con algunos corredores me confirmaron un error en la medición de unos 300 m. En fin, creo que hemos ganado con el nuevo recorrido pero deben ponerse las pilas para ajustar el quilometraje en la próxima edición. Hay bastantes fallos a corregir: grandes colas en el guardarropa, tapones en la salida y por supuesto la distancia. Lo demás muy bien: buena bolsa de corredor, duchas, bocadillo en la llegada...


  • Achraf         20:27      pos 73  (660)
  • Pere             24:13      pos 177
  • Unai            24,29      pos 200
  • José Luis  1:34:36     pos  401  (1547)

Jean Bouin i Cursa dels Nassos

Hice estas dos carreras para ir cogiendo ritmo de competición y ver si soy capaz de volver a correr más o menos rápido.

25-11-2018 Jean Bouin  10 kms.

Me apunté a esta carrera un poco empujado por el grupo de corredores de La Coma. También he de reconocer que me hacía cierta ilusión ya que nunca había corrido esta carrera, la clásica por excelencia de las carreras que se celebran en BCN. Mis compañeros llegaron un poco justos de tiempo para mi gusto pero al final nos dió tiempo para dejar las mochilas en el guardaropa y calentar un poquito.
Acharf y Sergio, al igual que yo, corieron el diez mil y Pere, que debutaba en el mundo de las carreras se decidió por los 5 kms. La verdad es que el perfil de la parte final de la carrera es bastante duro. Fui, como siempre, de más a menos y ese final en subida se me atragantó un poco.
Nuestras posiciones quedaron así:
  • Pere          24:07       pos 291 (1411)
  • Achraf      42:14       pos 631 (6352)
  • Sergio       46:30       no consta porque se dejó el chip
  • José Luis  45:11       pos 1157 (6352)
Carrera muy bien organizada a pesar de ser multitudinaria



31-12-2018 Cursa dels Nassos  10 kms

Hacía varios años que no podía venir a esta carrera por motivos laborales. Fui con Aitor y la idea era quedar con algunos compañeros de La Coma que ya no están allí. Siempre es una alegría ver a personas que han empezado contigo y ves que todavía siguen corriendo y participando en carreras. Desgraciadamente fue difícil coincidir con ellos entre tanta gente y solo los pude ver un momento al finalizar la carrera. Me hizo especial ilusión que me acompañara mi hijo Aitor el cual también se está animando a participar en este mundillo de las carreras. Yo hice lo que pude y mejoré algo en relación a la carrera anterior aunque no he acabado contento con mi marca.

  • Alejandro      43:11      pos 1698  (9155)
  • José Luis       44:46      pos 2200
  • Sergio            47:07     pos 2961
  • Javi               47:58      pos 3238
  • Aitor             50:31      pos 4168



miércoles, 14 de noviembre de 2018

20-10-2018 La Marxassa 62,5 kms

Como no estaba muy satisfecho con mi estado de fondo como pude comprobar en la Travessa Carros de Foc en el último fin de semana de Julio y más tarde en la Marató de Budapest decidí inscribirme en esta marcha. La Marxassa es una prueba que enlaza Sant Martí del Montseny con la ermita de Sant Simó en Mataró a lo largo de 62,5 kms. El recorrido es bastante corrible ya que buena parte transcurre por pistas y el desnivel no es especialmente duro. Son unos 1600 m de desnivel positivo y algo más de negativo ya que empieza a 600 m de altitud y termina al nivel del mar.



Un poco antes de las 6 de la mañana salíamos en autobús desde Mataró en dirección a la salida y a les 6:55 empezábamos a andar y trotar. Al subir al autobús ya te dan la acreditación por lo que no tienes que esperar para salir. Bajas del vehículo y ya puedes empezar.


Bajas unos 100m de desnivel y tienes unos 400 de subida hasta Font Martina, donde está el primer avituallamiento, muy completo por cierto, en el punto quilométrico 9,5 aproximadamente. Este tramo discurre por senderos entre bosques preciosos muy típicos del Montseny. Empiezas de noche aunque en poco rato amanece, en algo menos de una hora.


A partir de aquí sigues por senderos y pistas, básicamente de bajada aunque con algunos tramos de subida, no muy dura pero que te rompen el ritmo. Mi gemelo derecho me molesta y prácticamente fui con dolores hasta el final.



Llegamos a Sant Celoni (km.26) y después de pasar por una zona industrial y atravesar la carretera por un punto un poco delicado empieza la subida por el Massís del Montnegre. Bonitas vistas y preciosos bosques son la tónica de este tramo hasta llegar al avituallamiento de Sant Martí de Montnegre (km 36) en el cual puedes hacer el aperitivo: patatas fritas, fuet, olivas y bebidas incluyendo vermout.  Desde aquí queda un poquito más de subida para ya bajar decididamente a Vallgorguina (km 45) donde en la pista polideportiva del pueblo hay instaladas mesas para comer ensalada, butifarra, acompañado todo de todo tipo de bebidas y para acabar puedes tomar un café.



No sé que hora sería pero ya era consciente que no igularía mi tiempo de 9 h 3 min de la edición del 2015. Esuve comiendo y charlando con una chica de Lloret de Mar con la que fui coincidiendo en muchos tramos de la marcha. Ella sale un poco antes que yo pero aunque había momentos en que la veía unos 100 o 200 m delante mío nunca la llegaba a alcanzar. En los siguientes avituallamientos, hasta tres antes de la llegada, cuando yo llegaba ella ya salía.



Antes de llegar a Mataró pasamos por un zona con excelentes vistas hacia el mar. Llegué a Sant Simó en 9 h 42 min y entonces me comentó que había sido la primera mujer de la clasificación.



Después me dirijí haci el Club Natació Mataró donde nos podíamos duchar y vuelta a casa donde podría descansar lo que quedaba de día y al día siguiente ya que esta prueba se celebra en sábado, lo cual es de agradecer.


Evidentemente las fotos más chulas no son mías, las he bajado de la web de la marcha.