martes, 29 de marzo de 2022

1-2 Marzo 2022. Ruta circular por la Alta Garrotxa.

Hace tiempo que teníamos pensado hacer una travesía por la Alta Garrotxa. Ya habíamos estado por la zona hace un par de años y nos encantó. Antonio había visto en Wikiloc una ruta bastante exigente que enlazaba Beget con Beuda, haciendo el Comanegra, Puig de les Bruixes, Puig Bassegoda y Mare de Deu del Mont. En total un recorrido de 40 kms y 3000 m de desnivel positivo y que bautizaron con el pomposo nombre de "Els Annapurnes de l´Alta Garrotxa". Nos llamó la atención, aunque éramos conscientes de que sería una ruta larga y dura, en la que problablemente nos perderíamos en algún tramo y que posiblemente se nos haría de noche. Tenemos doce horas de luz solar y aunque de entrada este tiempo debería bastar, sabemos que con estos desniveles los quilómetros no se hacen tan rápido. Para llegar hasta Beget decidimos hacer una primera etapa desde Beuda por zonas más bajas de la Alta Garrotxa.



Día 1. Beuda-Beget. 35 kms +1224 m.

No sabíamos con exactitud la distancia de esta etapa ni el desnivel que teníamos que afrontar. Mirando el mapa ya vimos que no debíamos subir a cotas altas. Aún así, salimos temprano de Terrassa y antes de las 7 de la mañana iniciamos la marcha desde Beuda. Mirándolo en perspectiva, es evidente que salimos demasiado pronto, aunque también es verdad que aprovechamos para tomárnoslo con calma y pararnos a disfrutar de la magnífica vegetación de la zona.


Hacemos el primer tramo hasta Tortellà siguiendo una ruta editada en Wikiloc. Salimos de Beuda (338 m) por la carretera que conduce a Besalú, pero a los pocos metros tomamos una pista asfaltada a la derecha. Seguimos esta pista un rato hasta que encontramos palos indicadores que nos llevan por sendero. Es un tramo bastante llano pero que cruza varios tramos de rieras que nos hacen subir y bajar en algunos puntos. Pasamos por  Sales de Lierca y llegamos a Tortellà. Aquí, debemos encontrar las marcas del GR1 y seguirlo hasta el Coll de Palomeres. Lo encontramos en la parte baja del pueblo, lo seguimos y paramos para comer algo en el magnífico Pont de Llierca. Hace años que había estado bañandome en familia en las gorgas bajo el puente. Es un puente románico, que se ha consevado hasta nuestros días y que es un importante cruce de caminos. 


Pont de Llierca

Nosotros seguimos por el GR1 y vamos cogiendo algo de altura, aunque de forma suave y progresiva. Pasamos por Coll Pregon (553m) hasta alcanzar el Coll de Palomeres (615 m). Aquí debemos dejar el GR si somos capaces de encontrar el sendero que pasa por Aiguabella y nos lleva hasta el Pla d´en Pei. Si no lo hacemos, nos queda la opción de seguir el GR hasta Oix. Nos cuesta encontrarlo, pero después de seguir por una pista y dar media vuelta lo intuimos detrás de unos hilos eléctricos para ganado. Se encuentra prácticamente en el mismo collado. Al principio está poco marcado pero poco a poco se va haciendo un camino evidente. Después de rodear una masía (está señalizado) llegamos al valle que sube de Oix y tomamos el camino hacia la derecha. Hay bastantes carteles indicadores en este tramo. Seguimos hacia el Pont Trencat y aquí seguimos a la izquierda por el PR C-186. Podíamos haber elegido subir por El Grau de les Escales que a priori parece más atractivo, pero nos lo hacemos fácil. Vamos subiendo y llegamos a la Palanca de Samsó, donde nos cruzamos con el GR11 proviniente de Talaixà. Aquí paramos a comer y a relajarnos un rato cerca del agua y disfrutando de los rincones repletos de vegetación, con los troncos de los árboles cubiertos de musgo. Esto les confiere un aspecto muy especial.

Coll de Palomeres


Llevamos ya mucho rato con este tipo de vegetación y nos maravillamos con esos bosques que parecen salidos de un cuento de hadas. Pasamos también por una zona donde las encinas se abren camino entre la roca, confiriéndoles unas formas cuanto menos curiosas y muy llamativas. Una de esas encinas nos recuerda a un elefante, y la corteza le da un aire a su piel rugosa. En fin, que tenemos tiempo para recrearnos. 





Nos desviamos del GR11 durante un tramo para ver los robles monumentales de una zona llamada Hortmoier en la que se encuentra la ermita de Sant Miquel d´Hormoier, a la que no llegamos.


Hortmoier



Después de esta visita volvemos al GR. Pasamos la Collada de Muls (659) y bajamos hasta les Planes d´en Batlle, desde donde, por carretera llegamos a Beget (541 m), un pueblo precioso. Nos dirigimos al Hostal El Forn, donde dormiremos y cenaremos. Es pronto, contando todas las paradas hemos tardado  ocho horas y media. No nos hemos encontrado a nadie en todo el camino. Bueno sí, a una pareja mayor con un perro a la altura de Sales de Llierca, al inicio de la etapa. Hemos llegado pronto y nos da tiempo para aburrirnos, que tampoco está mal. Durante la cena, una mujer y sus dos hijas, parecen bastante apuradas con los problemas de conexión debido a una wifi débil. Problemas de estos tiempos.

Beget


Día 2. Beget-Beuda. 50 kms +3000 m.

La idea era salir lo más temprano posible. Tenemos por delante un etapa dura y exigente: "Els Annapurnes de l´Alta Garrotxa", nada más y nada menos. En el hostal no nos pueden preparar el desayuno hasta las 7 de la mañana. Lo entendemos, tampoco se van a pegar el madrugón solo por nosotros y aunque nos ofrecen dejarnos algo preparado, preferimos desayunar mejor y esperar hasta esa hora. Nos regalamos unos huevos fritos con bacon y mientras comemos, comentamos con el dueño del hostal si eso de casi no tener wifi no supone un problema en los tiempos actuales. El nos responde que algunas personas han anulado la reserva al llegar aquí, ante las dificultades para acceder a una conexión satisfactoria. El hostal tiene wifi propia y además en el pueblo hay wifi pública, pero parece ser que a veces fallan. Comento todo esto porque me llamó la atención la situación y es verdad que hoy en día es un problema para algunas personas no disponer de una conexión fiable. Yo sí que me pude conectar para dar el parte del día a Mayte.

Collada Fonda, cerca del Puig de Comanegra

Después de una animada conversación con el dueño del hostal sobre como es la vida en un pueblo tan pequeño y de tomar un café nos despedimos. Ya son las 7:30 y deberíamos ir haciendo camino, más teniendo en cuenta lo que tenemos por delante. De entrada, una subida hasta el  Puig de Comanegra de 1000 m de desnivel. El camino pasa por la puerta del hostal, la tarde anterior estuvimos mirando desde donde debíamos salir de Beget.


Puig de Comanegra


Tomamos el sendero y llegamos a la pista que sube a la Bassa de Monars. En una curva, en el Collet del Sunyer, cogemos un sendero a la izquierda y vamos subiendo por bosque y prados herbosos hasta el Collet del Clotic (973 m) y más adelante llegamos al Coll de Boix (1186 m). Seguimos por sendero hasta la Collada Fonda (1326 m) con buenas vistas del Canigó nevado y las últimas montañas del Pirineo antes de llegar al mar. Desde aquí coronamos El Puig de Comanegra (1557 m). 

Puig de Comanegra

Bajamos un poco y vamos careneando hasta el Puig de les Bruixes (1393 m) y desde aquí hasta el Coll de Sant Marc (1255 m). Descartamos hacer cima, ya que ya habíamos estado en ella y por hoy ya tenáimos bastante camino. En aquella ocasión no fuimos capaces de encontrar el camino hacia Les Bruixes. Estuvimos al lado pero estaba un poco tapado y no lo vimos. Esta vez pudimos desvelar el misterio. 

Puig de les Bruixes



Desde el Coll de Sant Marc tomamos el camino que en aquella ocasión habíamos hecho de subida. Vamos a buen ritmo y nos sentimos bien, también influenciados por la belleza del entorno. Bajamos por el camino, pero en un punto descartamos unos hitos que marcaban un sendero que salía a la izquierda. El camino que bajaba parecía el principal y además estaba señalizado. Llegamos a un punto donde todo se tapa y no vemos bien hacia donde tenemos que tirar. Más tarde , mirando el mapa, vemos que estamos en el Escaler del Joc. Probamos varios senderos, unos más claros que otros, pero no nos convence la dirección que toman. Estuvimos dando vueltas un mínimo de media hora, hasta que decidimos volver sobre nuestros pasos y en seguida llegamos al cruce que antes habíamos descartado. ¡¡En todo ese tiempo no nos habíamos acordado!!. Deben ser cosas de la edad. Vamos un poco enfadados con nosotros mismos, pero ya sin más contratiempos pasamos por Can Barrufa y llegamos a Sant Aniol d´Aguja. No sería el único error que cometeríamos, pero en ese momento no lo sabíamos. Decidimos parar a comer, ya que no lo habíamos hecho aún, aunque el desayuno fuerte que nos habíamos tomado nos había hecho aguantar bastante bien. Creo que hasta aquí tardamos unas cinco horas, quizás algo menos.


Sant Aniol d´Aguja


Desde Sant Aniol segimos por el GR11. El siguiente objetivo es el Puig Bassegoda. Sabemos que ahora nos toca una dura subida y no conocemos el terreno. El camino va ascendiendo de forma constante y aunque sin ser un desnivel demasiado pronunciado es de bastante mal andar, con muchas hojas secas y piedras sueltas. Llegamos al Coll Roig (829 m) donde vislumbramos nuestro objetivo. Digo vislumbramos porque intuimos el collado al que tenemos que llegar e imaginamos que la masa rocosa que queda a nuestra derecha es el Puig Bassegoda. Parece bastante lejos, eso sí. Seguimos el GR11 sin ser conscientes que la ruta de wikiloc aquí lo abandonaba y tomaba un sendero a la derecha que bordeaba nuestro objetivo por otra vertiente. Ahora si que el desnivel se hace muy pronunciado y se nos hace largo, quizás también debido al cansancio acumulado. Finalmente llegamos a la pista y al Coll de Bassegoda (1102 m), desde donde seguimos las indicaciones y llegamos sin más al Puig Bassegoda (1373 m), después de un tramo final de grimpada. Lástima que está todo cubierto de niebla y no tenemos vistas pero el enclave parece estupendo. 

Puig Bassegoda



Iniciamos la bajada pero lo hacemos siguiendo unas señales rojas y verdes y en sentido contrario al que hemos subido. En este tramo se nos abre un poco la niebla y podemos disfrutar de mejores vistas. Bajamos por una zona que en el mapa consta como el Caire de Comadells. No paramos de bajar y nos da la sensación de que lo estamos haciendo demasiado. Atravesamos varias zonas de pedrera, más propias de terreno de alta montaña que de la altura a la que nos encontramos. El sendero se suaviza y vemos unas marcas que salen a la izquierda pero lo descartamos y seguimos por el camino principal. Otra vez igual que por la mañana. Llegamos a la ermita de Mare de Deu de les Agulles. Decidimos parar para mirar el mapa y orientarnos. Vemos que nos estamos desviando de la ruta que tenemos prevista y desde la ermita tomamos un sendero que nos lleva de nuevo a la pista. La tomamos en subida a la izquierda y en una curva más arriba cogemos un sendero a la derecha que nos debería llevar al Coll de Rius. Al rato de andar por este sendero no nos acaba de convencer una curva que toma demasiado pronunciado y que  no coincide con la forma que se ve en el mapa. Antonio propone dar media vuelta y volver a la pista y asegurarnos el llegar a Coll de Rius por ella. Yo hubiera continuado por este sendero pero es verdad que la orientación despista un poco conparándola con el mapa. Como entiendo que Antonio se orienta mejor que yo, como así pude comprobar un poco más tarde, decidimos dar media vuelta. Estamos perdiendo demasiado tiempo y volvemos a estresarnos un poco. Desde la pista y sin más dudas llegamos a Coll de Riu (993 m). Justo allí hay un sendero que llega que seguramente era el que habíamos abandonado. Subiendo por la pista yo estaba absolutamente desorientado y ya no sabía bien donde estaba el Puig Bassegoga, a pesar de estar rodeándolo casi completamente. Antonio se encargó de explicarmelo aunque en un principio tuve mis dudas de que tuviera razón. 



En este punto debemos tomar una determinación. Es evidente que se nos hará de noche y que no conocemos el camino para llegar hasta la Mare de Deu del Mont. Posiblemente debamos descartar subir hasta el último de los "Annapurnes", pero aún así tomaremos la decisión más adelante. Desde el collado tomamos la pista que baja y que indica Albanya y esperamos que más adelante se cruce con el GR11. Debo parar el Garmin ya que se está quedando sin batería. Hasta ese punto me ha marcado 32 kms y unos 2500 m de desnivel positivo. Ahora sí que nos orientamos bien y llegamos a Can Nou, donde retomamos el GR.  En el Collet de Can Nou el GR el se desvía a la izquierda y nosotros seguimos por pista en dirección a Lliurona. La pista discurre todo el rato en una clara progresión ascendente, no demasiado dura pero sí continuada. Irremediablemte se nos hace de noche a las 7 de la tarde. Llamamos por teléfono a nuestras familias para informarle de que llegaremos tarde. Casi no hay cobertura.

Mirador bajando del Puig Bassegoga


Antes de llegar a Lliurona salimos de la pista y tomamos un sendero a la derecha que nos lleva a este pequeño enclave. Había vida allí, ya que se veían bicicletas y luz en una casa. Ya hemos renunciado a subir a la Mare de Déu del Mont. Conectamos el googlemaps para que nos dirija por el camino más rápido hasta Beuda. Nos marca una distancia de 12 kms. Al poco nos desvía de la pista asfaltada y nos lleva por otra sin asfaltar, que además, de entrada, es de subida. Yo me cabreo un poco porque ya no esperaba más subidas y quería correr hasta el final y pongo en duda que ese sea el mejor camino. Antonio me pregunta que como puedo estar tan seguro de que era mejor seguir por la pista asfaltada si no la conozco. Pienso que tiene razón y asumo aceptar de buen grado lo que se nos presente. Empieza a llover. No nos podemos quejar, había previsión de lluvias desde el inicio de la tarde y de momento nos ha respetado hasta ahora. Poco a poco la pista deja de subir y en clara bajada nos devuelve a la pista asfaltada. Trotamos y trotamos y a las 8:45 de la noche llegamos al coche. Estamos exhaustos y ahora hay que volver hasta Terrassa. Llegamos a casa prácticamente a las 11 de la noche.

Ha sido una travesía estupenda. Nos ha faltado la guinda final, la ascensión a El Mont, pero bueno, ahora con un mayor conocimiento de la zona ya nos podemos plantear alguna ruta que lo incluya. Nos ha gustado mucho la Alta Garrotxa y no nos hemos encontrado con nadie en todo el día. ¡¡Nadie!! Hemos disfrutado mucho del entorno y nos hemos estresado un poco con las pérdidas, más yo que Antonio, pero ha valido mucho la pena. Nos queda la espinita de no haber hecho todo el recorrido previsto. Quizás, en otra ocasión y con más horas de día. 

Por último agradecer a las personas que publicaron esta estupenda ruta y que nos han servido de inspiración. Gracias.










martes, 8 de marzo de 2022

Curses Novembre-Desembre 2021 i Gener 2022

Después de la marató de BCN he parado una semana y he seguido entrenando. Tenía ganas de correr sin objetivos y dejar las tiradas largas para la montaña. La primera carrera era escasamente tres semanas después de la maratón y no era otra que la Cursa de la Campana, a Vacarisses. 

Como no quiero dar las mismas explicaciones en cada carrera diré ahora que, a pesar de entrenar y de esforzarme, cada vez mis marcas son sensiblemente peores. Sé que es ley de vida, ya tengo 58 años, pero reconozco que aún me cuesta aceptarlo. En mi interior todavía está ese ser competitivo, que quiere hacerlo mejor y además se cree que puede hacerlo mejor. Pero la verdad es que cada vez me apetece menos llevar un ritmo agónico y no me apetece sufrir. Antes era capaz de aguantar ese sufrimiento, ahora no quiero o no puedo, no lo sé con certeza. Aunque mis sensacione son las de estar esforzándome, los resultados cada vez son más discretos. Tampoco es que yo haya sido un fuera de serie, pero estaba satisfecho con mi nivel. Sigo disfrutando, sobre todo en la montaña, y tengo la sensación de que voy más rápido aunque el maldito Garmin te pone rápido en tu sitio. Aún así suelo acabar contento y creo que ha llegado la hora (por fín) de no mirar el reloj y sobretodo no decir ya nunca más la palabra ANTES. Sé que se me escapará de vez en cuando pero voy a intentar centrarme en el hoy y de valorar lo que hago hoy, sin compararlo con ANTES.

27-11-2021 Mitja Marató de la Cursa de la Campana.

Esta carrera es de las fijas en mi calendario. La proximidad, el buen hacer de la organización y el perfil asequible (+800 m), hacen que siempre me apetezca hacerla. Es muy corrible, con un recorrido variado. Además me trae buenos recuerdos. Desde hace varios años opto por inscribirme a la distancia de media maratón. Existe también la distancia clásica de algo más de 14 kms. Este año han cambiado la fecha, como otras tantas carreras, y la han pasado del mes de junio al de noviembre. Espero que el próximo año vuelva a su fecha habitual para así poder darnos un baño en la piscina al acabar la carrera.



A las 8 de la mañana y al sonido de las campanadas de la iglesia del pueblo dan la salida. La gente sale que se las pela. Yo me lo tomo con calma, posiblemente con demasiada. Voy haciendo a mi ritmo de correr-trotar en el llano y las bajadas y andar en las subidas, aunque también intento trotar cuando éstas son ligeras. Tengo buenas sensaciones, me encuentro bien y creo que ya no me puede adelantar nadie más, debo estar en la cola de la carrera.



Hay tramos por bosque muy corribles, subidas duras por pista, otras subidas explosivas pero cortas y un par de bajadas técnicas. Un tramo final de subida de varios quilómetros, que se deja correr casi hasta el final, da paso a la por fin deseada bajada hasta el pueblo de  Vacarisses.



Mi tiempo final ha sido de 2:41:01 y la posición la 127 sobre 153 llegados. Después, el típico bocadillo de butifarra, conversaciones varias y para casa. Genial todo.




25-12-2021 Pujada a La Mola per Nadal.

Ya he perdido la cuenta de las veces que he participado en esta carrera en los últimos años. Me encanta el ambiente que hay entre los corredores en un día tan especial. Siempre me apunto el mismo día ya que la noche anterior suelo ir a dormir bastante tarde, pero hasta el día de hoy no he tenido problemas para levantarme, aunque haya dormido solo tres o cuatro horas. La hice dos veces en las semanas anteriores para ver si era capaz de hacerla más o menos bien, aunque eso tampoco es un problema, ya que muchas personas la hacen andando. Es más un día de compartir que de competir aunque cada uno se pone su objetivo, especialmente los corredores de más nivel. 



Antes de las nueve de la mañana ya estaba allí para asegurarme mi dorsal. La salida es a las 10, tiempo que aproveché para hablar con otros corredores y calentar un rato ya que el recorrido es todo subida, desde el primer metro. En total son 3,8 kms y 467 m de desnivel positivo. Este año, en plena sexta ola de la COVID, el número de inscritos era menor y el ambiente un poco más triste. Esto está pasando en todas las carreras.



Dan la salida y antes de llegar a Can Pobla ya tengo que andar en algunos tramos, así me tomo algunos respiros. Voy subiendo y no me encuentro del todo mal y corono La Mola con un tiempo de 37:50, en la posición 107 de 193 participantes. En la cima siempre hay un extraordinario ambiente y la gente te anima mucho. Ahora toca bajar de nuevo (aunque ya es por libre) para poder beber y comer algo. Este año hay poco ambiente. la gente coje su bolsita y se va para el coche. Nada de quedarse allí y disfrutar del día. Maldita COVID.

Últimamente se prodigan comentarios en las redes sociales acerca de la capacidad de los corredores y ciclistas populares para hacer carreras largas y duras (nada que ver con ésta). Estas críticas vienen dadas por deportistas profesionales (más bien ex-profesionales) que acusan a muchos populares de no estar preparados, de que sus ritmos son muy lentos e incluso de que gastan mucho en material pero poco tiempo en entrenar. Supongo que en cierto modo tienen razón, pero no entiendo esta tendencia a criticar a todo el mundo en lugar de animar a las personas a realizar estas actividades con mejor preparación, haciendo buenas sugerencias en lugar de despacharse a gusto hacia las personas que con mejor o peor criterio se ilusionan con retos exigentes. Estoy un poco cansado de escuchar comentarios de gente enfadada sin ningún ánimo de crítica constructiva.

31-12-2021 Cursa dels Nassos 10 kms.

He vuelto a esta carrera que siempre me ha gustado después de tres años sin participar. Mi objetivo inicial era estar entre los 45 y 50 minutos. Sé lo que actualmente me cuesta mantener un ritmo de 4:30 por quilómetro  por lo que sabía que bajar de 45 minutos sería una misión casi imposible. Pero en las dos últimas semanas antes de la carrera me sentí especialmente bien en los entrenamientos, mucho más ligero y ràpido que últimamente. 



Así que me presenté en la línea de salida donde tuve serios problemas para aparcar ya que han cerrado todas las amplias zonas de aparcamiento cercanas al pabellón de la Mar Bella. Aún así llegué con tiempo para la foto correcat y para calentar un buen rato con el objetivo de salir rápido. De hecho salí muy fuerte y en los primeros quilómetos me salieron unos parciales incluso demasiado rápidos. Sabía que tenía que aflojar un poco porque el tramo que va desde el km. 5 al 8 siempre se me atraviesa.



Así fue. Paso el 5000 en 21:50 y confío en que podré bajar de los 45 minutos. Pero no, cada vez voy más flojo y en los dos últimos quilómetros, donde siempre he podido apretar, me veo sin fuerzas para hacerlo. Llego como puedo, con un tiempo de 45:26 y en la posición 1235 de 4521 llegados.



La realidad es que la marca está muy bien, pero me he quedado con la sensación de que, como casi siempre, he gestionado mal la distancia y si hubiera salido algo más despacio, hubiera acabado mejor. Aunque eso nunca lo sabré. Un buen test para la Mitja de Terrassa.




23-01-2022 Mitja Marató de Terrassa.

Ha sido mi 17ª participación en esta carrera. Muy malas sensaciones, quizás ha sido la media maratón en la que me he sentido peor. De hecho, he registrado mi peor marca en media si no contamos la primera que hice. Lo peor no ha sido la marca, es lógico ir a menos con el paso de los años y lo raro sería que siguiera mejorando, lo peor ha sido lo mal que me he encontrado. Me he venido arriba con las buenas sensaciones de las últimas semanas entrenando y me he planteado salir con la liebre sub 1:40. ¡¡¡Qué ingenuo!!!, o qué flipado, según se mire, ya que con toda la experiencia que tengo no puedo cometer esos errores de cálculo aunque a mi favor debo decir que se añadió un factor inesperado: problemas para respirar.



Bueno, Aún así, como siempre fue una mañana agradabable. Estuve en la carpa correcat entregando los dorsales a los miembros de la asociación que estaban inscritos. Eran pocos. Atrás ya quedan aquellos tiempos en que entregábamos más de cien dorsales. Hay que decir también que la carrera ha venido a menos y que en general el ambiente está deprimido. No hay alegría, la Covid nos ha vuelto tristes, pero a pesar de todo hay que agradecer que en plena 6ª ola se haya organizado la carrera. Hace unos años se inscribçian más de 2000 personas y en esta edición han llegado a meta 746 corredores.



Después de calentar me sitúo al lado de la liebre sub 1:40. Dan la salida y en seguida noto que no voy bien. Me cuesta respirar, tengo serias dificultades para tomar aire. En seguida bajo el ritmo y pienso que será una carrera de supervivencia. Fuera mirar el reloj. Como decía antes en las semans anteriores me había sentido muy bien en los entrenamientos y mis ritmos y sensaciones eran los mejores en mucho tiempo. Pero he tenido la mala suerte de pillar el día tonto justo el día de la carrera. Voy tirando, pero la verdad es que aún bajando el ritmo, sufro bastante. Pienso que en la segunda parte de la carrera iré mejor ya que hay más llano y bajadas. Y sí,algo mejor me encuentro, pero tampoco aparece la mejoría esperada.



Mayte me anima en diferentes puntos de la carrera y eso me reconforta. Sobre el quilómetro 14 me adelanta el grupo de la liebre sub 1:45. Los conozco y me invitan a unirme a ellos. Con amabilidad, declino la invitación, prefiero seguir a mi ritmo. Entro en meta en 1:48:31 y en la posición 428.



Creo que por fin ha llegado el momento de olvidarme de competir. Hasta hoy, aunque me lo he propuesto, no he sido del todo capaz de llevarlo a cabo. Las últimas carreras no han sido lo que esperaba. Y no me refiero a marcas. Me refiero a ser capaz de disfrutarlas, llevar la cabeza alta y mirar el ambiente. Hace tiempo que lo sé, pero ahora algo ha cambiado. Ahora lo siento y quiero hacerlo así. Por fin.











miércoles, 17 de noviembre de 2021

07-11-2021 Marató de BCN

Por fin he llegado a completar mi maratón (de asfalto) número 25. Me hacía ilusión llegar a esa cifra y finalmente lo he conseguido después de haber quedado frustrado el intento en el año 2020 por razones obvias y por todos conocidas. Como conservé el dorsal de la edición del año anterior, este año no he tenido que desembolsar el importe de la inscripción y además a todos los que optamos por esa opción nos hemos podido inscribir gratuitamente en la Mitja de BCN, que se celebró, como es habitual, tres semanas antes de la maratón. 




Ya no entreno como antes y evidentemente mis expectativas tampoco son las mismas, aún así me resisto a no ser mínimamente competitivo (para mí) y todavía me marco objetivos que normalmente son poco realistas. Siempre empiezo el entrenamiento específico dos meses antes de la fecha de la carrera y en esta ocasión no ha sido una excepción. Mi preparación ha sido un poco anárquica. Ya no hago series (por lo que mis ritmos se han rebajado ostensiblemente) y no hago tiradas largas de más de dos horas, Me he inscrito a tres carreras, las que se me han puesto a tiro: 10 kms de Ripollet, 5 kms de La Cursa de les Dones a Terrassa y la Mitja Marató de BCN. Después de ésta estuve una semana sin entrenar ya que tenía planificada con Antonio una salida de cuatro días a Ordesa y La Pineta, la cual describí en mi crónica anterior.

29-08-2021 Cursa Festa Major de Ripollet. 10 kms.

Es la tercera vez que he hecho esta carrera, una clásica de las pruebas de 10 kms y que muchos corredores utilizan como un test para conocer su estado de forma después de las vacaciones y como inicio de la temporada. Mi plan era correr con tres compañeros a los que he iniciado en esto del "running" y para dos de ellos era su primera carrera. Ellos venían de Monistrol de Montserrat y habíamos quedado que me uniría a ellos en el tren, en la estación de Terrassa. Cuando llega el tren, nada, ni rastro de ellos. Confío en que quizás no han sabido verme y que me los encontraré cuando bajemos del tren, en Cerdanyola. Nada tampoco. Algo contrariado me dirijo hacia Ripollet andando y a la zona de salida de la carrera. Recojo mi dorsal y dejo mi bolsa en el guardarropa. Me hago la foto con el grupo de correcats presentes en la prueba. No paro de mirar a mi alrededor a ver si aparecen por alguna parte. Caliento, dan la salida y nada.

Foto correcat


Dado el ritmo de mis entrenamientos y mi estado de forma me conformaba en esta carrera con bajar de los 50 minutos ya que entrenando me cuesta mucho bajar de los 5 min/km. Más teniendo en cuenta que el perfil del recorrido no es para hacer buenas marcas ya que son dos vueltas a un circuito de 5 kms. con bastantes tramos de subida y hay que saber gestionarlo bien. Salgo a buen ritmo, mucho mejor que en los entrenos y me siento bastante bien. Tengo dudas sobre si aguantaré pero decido seguir así. Paso la primera vuelta en algo más de 23 minutos y la segunda en algo más de 24. Mi tiempo final ha sido de 47:14 (4.43 min/km) y la posición la 103 de 231 llegados a meta. Me siento contento, ha ido mejor de lo esperado.


Mis tres compañeros


Después de cambiarme me paso por la mesa de la organización para intentar que me den las camisetas de mis compañeros. Cuando me las están entregando escucho unas voces por detrás que me llaman. Son ellos, han llegado tarde. Se han equivocado al coger el tren y ha sido un milagro que llegaran a tiempo. De hecho han llegado tarde, pero les han dejado salir y han corrido con el chip en el bolsillo. Estoy algo enfadado con ellos ya que les expliqué minuciosamente el trayecto incluyendo los horarios. En fin, lo importante es que han podido participar y les ha gustado la experiencia. De eso se trataba. A ver si la próxima vez sale mejor.



03-10-2021 Cursa de Les Dones. Terrassa, 5 kms.



Era la primera vez que participaba en este tipo de carrera, más lúdico-festiva que competitiva, pero me pareció un buen entrenamiento de calidad. Además tiene fines benéficos. Llegué pronto (como siempre) y calenté bastante rato. Quería salir a tope para ver cuanto era capaz de dar en una distancia tan corta. Durante el calentamiento saludé a muchas personas con las que he ido coincidiendo de una manera o de otra a lo largo de estos últimos años, tanto corredoras como voluntarias. Me hizo especial ilusión encontrarme con Albert, un corredor de Castellar del Vallés con el que durante un tiempo coincidí en bastantes carreras, tanto de asfalto como de montaña. ¡Un placer haberte visto, Albert! Por megafonía explican el sistema de salida. Los primeros cajones están reservados exclusivamente para mujeres. Los hombres solo pueden salir a partir de la tercera salida. Pienso que eso condicionará mucho mi objetivo ya que tendré que adelantar a muchas personas, algunas de ellas en grupos numerosos. Incluso muchas mujeres hacen esta carrera andando, solo por el hecho de participar. No es ninguna crítica, me parece estupendo. Realmente no tuve ningún tipo de problema y toda la gente que tenía por delante la pude adelantar sin problemas. De hecho, la mayoría de personas que salieron andando lo hicieron detrás mío. El recorrido es mitad subida y mitad bajada. Si gestionas bien la primera parte en la segunda puedes volar. No me fue del todo mal y finalicé con un tiempo de 22:17 (4:28 min/km). La posición final ha sido la 46 de 142 llegados en hombres.

17-10-2021. Mitja Marató de BCN. 21 kms, 97 m (y medio)

Solo he participado dos veces en esta carrera aunque guardo buenos recuerdos ya que aquí tengo mi mejor marca en media maratón (año 2010, 1:27:21). Desde luego, esto queda ya bastante lejos en todos los sentidos, tanto a nivel de marca como de tiempo. Esta es una buena carrera, muy bien organizada y con una gran nivel de participación, tanto en cantidad como en calidad. Voy en tren desde Terrassa, en el de las 6:37 de la mañana. En la estación de Sabadell Sud una marea de gente joven invade literalmente el tren. Vienen de fiesta y no paran de gritar, beber y fumar. De todas formas, aunque algo pasados, van de buen rollo y no hay ningún problema.

Salida Mitja de BCN



Llego temprano, aún de noche, a Arc de Triomf. Para acceder a la zona de salida hay que desvestirse y dejar la bolsa en el guardarropa. A esta zona solo pueden acceder los corredores, los acompañantes no pueden (por protocolo Covid) y es todo muy cómodo: espacio para calentar, amplitud de los accesos y cajones de salida, en fin, todo muy bien. Sigue siendo de noche, la salida es un poco pronto, a las 8:30, y aún faltan un par de semanas para el cambio de hora. Un cuarto de hora antes de la salida entro en el cajón. La mayoría lo hacemos con mascarilla aunque algunos lo hacen sin ella. Música a todo volumen, frases motivadoras del spiker y toda la parafernalia típica del inicio de una carrera de larga distancia: "ha llegado el gran día, lleváis mucho tiempo entrenando y por fin lo vais a conseguir", "habéis entrenado duro para llegar hasta aquí, con lluvia (hace meses que no llueve), viento, frío, calor", "esas manos arribaaaaa". " vamos , todo el mundo a saltar", etc. Reconozco que soy un poco especial, me cansa esa euforia colectiva, no lo veo para tanto, al fin y al cabo es solo una carrera. Aunque si soy honesto, en otros momentos yo también he sido partícipe de esa euforia y me he emocionado con algunas frases, sobretodo las referentes al tiempo y a las condiciones de los entrenamientos. Quizás estoy un poco de vuelta de todo esto.



Por fin dan la salida. No tenía claro mi objetivo. Bueno sí, bajar de 1 h 45 min. pero intentar acercarme al máximo a 1:40. Al lado mío, un poco por detrás van las liebres de esta marca. Unos metros antes de llegar al primer quilómetro me suena el reloj y me marca el tiempo. Otros muchos relojes sonaron al unísono y uno de los componentes de la liebre se apresuró a decir que no hicieramos caso del Garmin, que los puntos quilométricos estaban perfectamente señalizados. Voy dejando al grupo por detrás, quizás voy demasiado rápido (seguro que sí). Paso el km 10 en 46:20 con la convicción de que no podré aguantar ese ritmo pero que haré una buena marca. Cuando me adelanta la liebre de 1:40 pienso que me empezarán a caer muchos minutos pero aguanto el tipo y acabo en 1:41:09, a un ritmo promedio de 4:43 min/km. El Garmin me ha marcado 21 km 400 m. No puedo pedir más. He hecho mejor marca de lo esperado. En la maratón será otra cosa.




19 al 22 de Octubre. Ordesa y La Pineta.

Al día siguiente me marchaba con Antonio al Valle de Ordesa y al de Pineta. Han sido cuatro días estupendos, haciendo quilómetros y bastante desnivel, pero a la vez he estado una semana sin correr ni un metro. Espero que no me afecte demasiado, aunque como ya he dicho mi entrenamiento ha sido un poco anárquico, y esta salida ya la teníamos planificada hace meses puesto que en esos días tenía vacaciones.



07-11-2021. Marató de BCN. 42 kms, 195 m

Por fin el gran día. Dos días antes había acudido a buscar mi dorsal. Por desgracia ya no siento aquel intenso cosquilleo en mi abdomen que sentía años atrás. Ha dejado de ser algo tan especial. Ni siquiera lo he sentido en mi maratón número 25, cosa que me hacía especial ilusión conseguir. Pero nada, ni por esas. Ya no visualizo mi entrada en meta cuando estoy entrenando ni siento nada especial cuando realizo mi último entrenamiento. Y motivación tengo, si no no lo haría, pero ya no tengo esas bonitas sensaciones. No sé si es que ya he hecho muchas carreras y he conseguido todo lo que estaba más o menos a mi alcance o simplemente me falta entusiasmo, producto seguramente por estar viviendo una complicada época: Covid, ya tengo una edad, situación laboral precaria, etc. O será la suma de todo. Aún así, el día antes de la carrera estoy nervioso como siempre. Decido viajar en tren pero con FGC (Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya). Quiero evitar el ambiente que tuvimos que vivir tres semanas antes en RENFE, aunque no sé lo que me encontraré. Como debo coger el metro para llegar a Plaça Espanya puedo elegir cualquiera de las dos compañías. Afortunadamente todo fue mucho más tranquilo.




Sobre la salida, no tengo mucho más que decir ya que todo es calcado a la Mitja, tres semanas antes. No es el mismo lugar, estamos en la Avda María Cristina, al lado de las Fonts de Montjuic, y antes de la salida siempre se escucha el himno de la Barcelona Olímpica. Los varios "spikers" que hay intentan animar a los participantes con frases motivadores, gritos de guerra varios, música a todo volumen. Años atrás por lo menos ponían a AC/DC. Dan la salida, salgo en el tercer cajón y nos hacen esperar más de cinco minutos desde la salida anterior. La organización quiere que se mantenga una distancia prudencial para que no haya aglomeraciones. Me parece bien.



Mi objetivo durante la fase de preparación era la de hacer un sub 3:45 pero en los últimos entrenamientos me sentí especialmente bien y decidí arriesgar y acercarme lo máximo a las 3h 30 minutos. Me vine arriba y casi nunca que lo he hecho me ha funcionado. Digo "casi" porque gracias a ese espíritu conseguí bajar varias veces de 3:20 e incluso llegar a parar el crono en 3:10:46 en el año 2011. Algo que ahora me parece increíble pero que también me lo pareció entonces. Bien, no nos pongamos nostálgicos, estamos en 2021.




Mis primeros quilómetros fueron a menos de 5 min/km. Paso el km 10 en 48:12 y la media maratón en 1:43:54. Voy en tiempo de las 3 h 30 min pero no me siento cómodo. No me parece que lleve un ritmo demasiado alto pero me siento algo rígido de piernas y éstas no tardarán en empezar a quejarse. Hasta aquí bien: zonas con mucho público (Plaça Espanya, Sagrada Família, final de la Meridina en el paso de la media), buen ambiente, avituallamientos cada 2,5 kms. Tengo la certeza de que no podré aguantar ese ritmo ya que sin darme mucha cuenta los parciales son cada vez más lentos y empieza a adelantarme mucha gente, señal inequívoca de que voy a menos. Aguanto el rimo hasta el km 25 y paso el 30 en 2 h 32 min. Pero ya solo miro al suelo, intento centrarme en mis pasos y no mirar hacia adelante. Me estoy perdiendo el ambiente de la carrera. En el km 31 se me unen dos de los amigos con los que estuve en Ripollet. No me pillan en mi mejor momento. Ya sabía que estarian allí. Me hace ilusión verlos pero no lo parece por mi expresión facial. Estoy sufriendo aunque es un sufrimiento llevadero, lo puedo controlar. Les comento que voy muy justito, así que no me hagan hablar. Que ellos hablen todo lo que quieran pero que no me pregunten porque no puedo contestar. Nunca habían visto una carrera de la magnitud de una maratón y alucinan con el ambiente. Jorge, fresco como una rosa y contagiado por la euforia del momento, tira para adelante. Yo evidentemente, no hago ni el amago de seguirlo y lo pierdo de vista en poco tiempo. Dani se queda conmigo y me va animando. Van transcurriendo los quilómetros y pasamos por el Arc de Triomf  (km 35). Plaça Catalunya (km 37) y Colón (km 39). Mi promedio cada vez es más lento pero avanzo con la seguridad de que la acabaré. Ahora toca inicar la subida del Paral.lel pero no la haremos completa ya que la han suavizado dando un poco más de vuelta por otras calles. Por fin, llegamos a Plaça Espanya, Dani me sigue animando y yo solo pienso en acabar y poder parar. No puedo apretar en esos últimos 195 metros mágicos, no tengo fuerzas. Acabo con una digna marca de 3:42:19 (5.13 min/km). Agradezco a Dani su compañía pero al entrar en meta le hacen salir de la zona ya que no tiene dorsal. Después ya no fuimos capaces de encontrarnos (él no llevaba móvil). Por la tarde hablo con los dos y ambos están encantados con el ambiente de la maratón. Cuando lleven un poco más de tiempo corriendo se plantearán correr una. Les animo a que no quemen etapas tan rápido. Todo a su tiempo. A ver si para el 2023...



Posiblemente si hubiese llevado a cabo mi objetivo inicial (sub 3:45) no habría sufrido tanto y la marca hubría sido parecida. Aún así, y como me dijo un corredor, "eso nunca lo sabrás". Es verdad, y si no arriesgas tampoco sabes si eres capaz de conseguirlo aunque la maratón da para pocas sorpresas, la distancia siempre te pone en tu sitio.

Ah, mi posición ha sido la 3283 de 9100 llegados. La 129 de mi categoría de mayores de 55 años.